Se trata de un arco natural, resto de una antigua galería de cueva, desmantelada por la erosión, permaneciendo como relicto testigo de su existencia.
Subiendo a Gentilzubi, puede verse junto a él el Abrigo de Axlor, actualmente protegido por un enrejado metálico debido a los continuos saqueos de que era objeto. Se trata de una oquedad en la roca cuya importancia viene dada por constituir el yacimiento arqueológico más antiguo de Bizkaia, de edad Musteriense.